No es una historia de amor, tiene que ver con el dinero.
Tiene que ver con el dinero y con ser un poco listo, la verdad. Pero yo, en esa época, no lo era.
Trabajaba para una ONG desarrollando fondos. Total, de todas las estrategias de captación, la que mejor funcionaba era el Face to Face. Captar donantes en la calle.
Empezamos una campaña de captación de fondos en vía pública y fue muy bien. La segunda también funcionó perfectamente. Y la tercera. Y la cuarta.
Estábamos poniendo tanto esfuerzo en conseguir nuevos donantes que nos olvidamos por completo de los donantes que ya habíamos conseguido.
Los donantes que ya habíamos conseguido sentían que la ONG ya no les prestaba atención: no se les escribía, no se les enviaba nada, no agradecía su ayuda. Nada de nada.
No existía un plan de fidelización. Ni un protocolo de bienvenida. Ni una llamada de agradecimiento.
Nada.
La infidelidad que (casi) me arruina la vida.
¿Te imaginas que haces eso con tu pareja?
Dedicas todo el tiempo del mundo en intentar gustarle, pasas tiempo con ella o él, te interesas por las cosas que tiene que decir, os besáis…y cuando formalizáis la relación ¡Desapareces completamente!
Algo así ocurre en fundraising pero con un agravante.
Algo así ocurre en la captación de fondos, aunque es mucho peor.
La captación de fondos de pequeños donantes solo es rentable si los donantes están mucho tiempo apoyando económicamente a la organización, de lo contrario, todo el dinero que has invertido para adquirir ese donante, lo pierdes. No resulta rentable. Te arruinas.
¿De qué sirve una persona que durante 1 mes dona 12 euros?
De nada. No sirve de nada.
En cambio, si esa persona está 15 años, sí que sirve. Sirve de mucho.
Si no tienes un plan de fidelización, tu estrategia de captación de fondos, por muy buena que sea, no servirá de nada.
Esta fue la infidelidad que (casi) me arruina la vida.
Si quieres mantener con vida las llamas del amor, ya puedes empezar a hacerlo.
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PD: Son consultorías rápidas, eso sí, tienes que avisar con antelación para que te pueda reservar día y hora.
